Y para bien, hasta ese punto estoy convencido que vamos a salir de esta crisis por la puerta grande, ¿y gracias a quién?, pues, lógicamente, gracias a mis compatriotas. Hoy, yendo al trabajo, no he podido menos que derramar unas lágrimas; en los momentos más delicados de nuestro gobierno, cuando es el hazmerreír y nadie lo toma en serio a pesar de sus hercúleos esfuerzos por sacar esto adelante, ahí estamos, están, todos a una, caminando todos juntos y llenando balcones, terrazas y ventanales con la bandera de su gobierno, de su patria. Con todo este apoyo ¡cómo no vamos a superar esta delicada situación!, hoy mis compatriotas me han demostrado que sí se puede, todos bajo una bandera, la bandera de Apaña, la bandera de los apañoles. Podemos, claro que podemos salir de la crisis...