De pequeñito recuerdo que me obligaban a calzarme platacos de potaje francamente desagradables, y no porque mi madre cocinase mal, todo lo contrario, pero es que, a que mente enferma se le ocurre juntar en un mismo plato, garbanzos, espinacas y bacalao, y todo porque no se podía comer carne... manda cojones, pues hoy vengo yo a hablar de carne, y de pescao. Como heterosexual sano que soy (y no es que considere otras conductas sexuales depravadas, desviadas o contranatura, para nada) si en algún momento de mi vida se me ha pasado por la imaginación (sobre todo en la época del instituto y más allá) la posibilidad de hacer un trío era, evidentemente, con 2 hembras, jamás, y digo, JAMÁS, se me pasó por la cabeza la posibilidad de un trío diabólico . Habrá algún desviado que lo realice, pues bien, llegados a ese punto hay una regla de oro que nunca debe olvidarse, NUNCA, repito, NUNCA, debe haber cruce de miradas entre los tíos. Espero que si os surge esta posibilidad, al fin y al cab...