pero de tomo y lomo, lo que es un auténtico disparate, una completa ida de la más mínima cordura, eso es lo que eran las estanterías de un videoclub de barrio de finales de los 80.
En el anterior post le dedicábamos un post al cine, al buen cine si se quiere, pues el de hoy va dedicado no al buen cine, sino al mejor, mejor aún disfrutado en VHS, el hijoputa del VHS, y es que se impuso el sistema de peor calidad frente al 2000 y al Betamax (el mejor, admitido hasta por los profesionales), este último era el que teníamos nosotros (un super Betamax de Sony, y alucinante, hablamos de 1983 y nos salió la broma en esa época por 140.000 pelas). La putada es que al poco empezaron a escasear títulos (el primero en morir fue el 2000) y tuvimos que agenciarnos un VHS todoterreno.
Lo bueno de esto es que me hice con dos vídeos, asín que con 585 metros de cable, 38 clavijas y doscientas cincuenta lucecitas en cada uno cada vez que dabas al play o a grabar pude empezar a muy temprana edad el pirateo y saqueo de copyrights. Conseguí hacerme una videoteca a la altura del post de hoy. Por no hablar de una cinta a la que tenía un especial cariño, bautizada como La granja de San Francisco (el que adivine el por qué del título de la cinta tendrá premio).
Lo primero que te incitaba a fijarte en un flin perdido en la estantería era, por este orden, tías con poca ropa, tías con poca ropa atacadas por algún monstruo o tías con poca ropa dándose el filete con otras tías con poca ropa. Si algo era casi común en todas estas joyas trash era que la carátula te ofrecía siempre muchísimo más de lo que había realmente dentro. Tías buenorras que cuando ponías la cinta eran catetas lamentables, monstruos espectaculares que resultaban ser un calcetín en la mano de alguien (y que encima salía en el plano), por no hablar de esas películas que prometían sangre a borbotones y resultaban más recatadas y sosas que una primera comunión.
Pues imaginaos si eso pasaba con las películas de carátula atrayente que no serían las pelis que, directamente, te encontrabas con una de estas carátulas que os pongo abajo... pues que te daban todavía más ganas de verlas, y casi nunca defraudaban, actores en estado de gracias (gracias a las drogainas que llevaban encima), directores que no aparecieron nunca por el set de rodaje (y se nota, y no se les esperaba) bajísimos presupuestos destinados a comprar drogainas y diálogos y argumentos surgidos de algún trastornado enfrentado al mundo.
No he podido resistirme a poner algunas de estas joyas, dignas de encontrar su huequecito en algún museo del horror, ya no digo que hubiese fotochop en la época, pero joder, había fanzines con mejor calidad y sólo usaban recortes y pegamento.
Disfrutadlas, y si tenéis lo que hay que tener (buena conexión y la mula) descargaos alguna.
En resumiendo, si con una peli buena lo pasas bien con una mala lo pasas mejor... siempre y cuando la falta de talento y desvergüenza sea inversamente proporcional al dinero disponible (una vez descontadas las partidas de alcohol, sexo y drogaina).
En el anterior post le dedicábamos un post al cine, al buen cine si se quiere, pues el de hoy va dedicado no al buen cine, sino al mejor, mejor aún disfrutado en VHS, el hijoputa del VHS, y es que se impuso el sistema de peor calidad frente al 2000 y al Betamax (el mejor, admitido hasta por los profesionales), este último era el que teníamos nosotros (un super Betamax de Sony, y alucinante, hablamos de 1983 y nos salió la broma en esa época por 140.000 pelas). La putada es que al poco empezaron a escasear títulos (el primero en morir fue el 2000) y tuvimos que agenciarnos un VHS todoterreno.
Lo bueno de esto es que me hice con dos vídeos, asín que con 585 metros de cable, 38 clavijas y doscientas cincuenta lucecitas en cada uno cada vez que dabas al play o a grabar pude empezar a muy temprana edad el pirateo y saqueo de copyrights. Conseguí hacerme una videoteca a la altura del post de hoy. Por no hablar de una cinta a la que tenía un especial cariño, bautizada como La granja de San Francisco (el que adivine el por qué del título de la cinta tendrá premio).
Lo primero que te incitaba a fijarte en un flin perdido en la estantería era, por este orden, tías con poca ropa, tías con poca ropa atacadas por algún monstruo o tías con poca ropa dándose el filete con otras tías con poca ropa. Si algo era casi común en todas estas joyas trash era que la carátula te ofrecía siempre muchísimo más de lo que había realmente dentro. Tías buenorras que cuando ponías la cinta eran catetas lamentables, monstruos espectaculares que resultaban ser un calcetín en la mano de alguien (y que encima salía en el plano), por no hablar de esas películas que prometían sangre a borbotones y resultaban más recatadas y sosas que una primera comunión.
Pues imaginaos si eso pasaba con las películas de carátula atrayente que no serían las pelis que, directamente, te encontrabas con una de estas carátulas que os pongo abajo... pues que te daban todavía más ganas de verlas, y casi nunca defraudaban, actores en estado de gracias (gracias a las drogainas que llevaban encima), directores que no aparecieron nunca por el set de rodaje (y se nota, y no se les esperaba) bajísimos presupuestos destinados a comprar drogainas y diálogos y argumentos surgidos de algún trastornado enfrentado al mundo.
No he podido resistirme a poner algunas de estas joyas, dignas de encontrar su huequecito en algún museo del horror, ya no digo que hubiese fotochop en la época, pero joder, había fanzines con mejor calidad y sólo usaban recortes y pegamento.
Disfrutadlas, y si tenéis lo que hay que tener (buena conexión y la mula) descargaos alguna.
En resumiendo, si con una peli buena lo pasas bien con una mala lo pasas mejor... siempre y cuando la falta de talento y desvergüenza sea inversamente proporcional al dinero disponible (una vez descontadas las partidas de alcohol, sexo y drogaina).
Te lo has trabajado a fondo el post hoy y con excelentes resultados. Todo lo que dices sobre los sistemas de ver aquellos videos y las pelis que venian coincido con lo que dices.
ResponderEliminarSin embargo, y dada tu vocacional afición nata, de nacimiento, a los monstruítos, disculpa que pase de largo de ver ninguno de los títulos que ofreces.
Es que uno es muy escrupuloso y delicado de estómago de digerir, más bien de ojos de mirar.
Bienvenido al CHOKO tras tu ausencia.
¿ Puedo pasar sin verlas?, sin peligro de excomunión.
ResponderEliminarCoincido con Javier, si que te lo has currado.
A pesar de mi experiencia con el visionado de sus ofertas estaba dispuesto a arriesgarme con dos de los títulos (Prision Heat y Naughty stewardess) por sus sugerentes títulos, pero me he llevado la desilusión de que se trata, simplemente, de carátulas.
ResponderEliminarUna pena
Vuelves a lo grande jeje, mira que se gastan perras en hacer pelis cutres, es horroroso, aunque alguna vez sea para bien, una vez cogimos una que presuntamente era de mucho miedo y nos estuvimos descoj..todo lo que duró, se titulaba El Wendigo por si la pillas; y nosotros también nos quedamos colgados con mogollón de pelis beta, y después con todos los vhs, ahora compro pocos DVD porque al final te lo comes todo con patatas
ResponderEliminarNo será que no te estoy dando pistas para que veas pelis buenas Tella, ya depende de ti.
ResponderEliminarLa verdad es que llevo una racha rara Tella, a ver si me reincorporo plenamente.
Mamuma, sólo una, te engancharás...
ResponderEliminarVeo Bwana que le gusta la temática intelectualoide y se iba a por una par de WIP movies, le felicito por su buen gusto.
ResponderEliminarSorprendiome una frase tuya Maribel " ...ahora compro pocos DVD..." pirateo tanto que a veces me sorprende cuando me quieren cobrar el pan, jajajajajajaja
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